Los depósitos de poliéster son una excelente alternativa a los depósitos tradicionales de metal o plástico. Entre sus principales ventajas se encuentran:

• Mayor resistencia: El poliéster es un material altamente resistente a la corrosión, los impactos y los rayos UV, lo que lo convierte en una opción ideal para uso en exteriores.
• Ligereza: Los depósitos de poliéster son mucho más ligeros que los de metal, lo que facilita su transporte e instalación.~
• Versatilidad: Se pueden fabricar en una amplia gama de tamaños, formas y colores para adaptarse a las necesidades específicas de cada cliente.
• Facilidad de mantenimiento: Su superficie lisa y no porosa facilita la limpieza y el mantenimiento.
• Eficiencia: El poliéster es un material aislante, lo que ayuda a mantener la temperatura del contenido del depósito.

Absolutamente. Los depósitos de poliéster están fabricados con materiales que cumplen con las normativas de seguridad alimentaria y son ideales para el almacenamiento de agua potable. Su superficie no porosa impide la formación de bacterias y algas, asegurando que el agua se mantenga limpia y segura para el consumo.

Además, el poliéster es resistente a los rayos UV, lo que significa que la calidad del agua no se degrada con la exposición al sol.

La instalación de una piscina de poliéster es un proceso rápido y eficiente. Primero, se prepara el terreno para asegurar una base sólida y nivelada. Luego, la piscina prefabricada se coloca en el hueco preparado y se ajusta para asegurar su alineación y nivelación perfectas.

Finalmente, se rellena el espacio alrededor de la piscina con un material específico para proporcionar soporte estructural y se conectan las tuberías y el sistema de filtración. En cuestión de días, tu piscina estará lista para llenarse de agua y disfrutar.

El mantenimiento de depósitos y piscinas de poliéster es sorprendentemente bajo. Para los depósitos, se recomienda una inspección regular para asegurar que no haya daños superficiales y mantenerlos limpios.

En el caso de las piscinas, el mantenimiento incluye la limpieza regular del filtro, el mantenimiento del equilibrio químico del agua y la limpieza de la superficie con productos no abrasivos para evitar daños en el acabado. Siguiendo estas simples pautas, tus instalaciones de poliéster mantendrán su funcionalidad y estética por muchos años.

Con el cuidado y mantenimiento adecuados, los depósitos y piscinas de poliéster pueden durar décadas. La vida útil de estos productos está significativamente influenciada por factores como la calidad de la instalación, las condiciones ambientales y el nivel de mantenimiento. Sin embargo, es común que las piscinas de poliéster superen los 20 años de uso, mientras que los depósitos pueden tener una vida útil aún mayor, ofreciendo una excelente relación calidad-precio a largo plazo.